El Sindicato Médico denuncia en Trabajo las condiciones de 4 centros de la Sanidad de Puig en Alicante
El Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM-CV) denunciará ante la Inspección de Trabajo las condiciones que deben soportar los facultativos en 4 centros de Alicante. Dos en la capital -Babel y Aaiun-, uno en las Playas -Cabo Huertas- y un cuarto en la localidad de Muchamiel, a escasos kilómetros de la capital de la provincia. No es la primera vez que se quejan, pero al no recibir respuesta de la Consejería de Sanidad valenciana, que ahora dirige Miguel Mínguez en el Gobierno valenciano que preside el socialista Ximo Puig, han decidido elevar esa denuncia a la Inspección de Trabajo.
Las condiciones de las áreas de descanso en que deben velar sus guardias los médicos de los consultorios valencianos no siempre son las más idóneas. Esta es la denuncia del Sindicato Médico CESM-CV, que harto de remitir papeles de protesta a la Consejería de Sanidad, según confirman fuentes de ese mismo sindicato, ha decidido llevar ante el departamento de Salud Laboral de la Inspección de Trabajo a la citada Consejería.
Las causas de la denuncia son de lo más variado. En el caso de Muchamiel, una de los motivos que ha impulsado al sindicato médico a dirigirse a Trabajo es que los colchones de esa área de descenso se apilan en una pared y, cuando por fin pueden ser extendidos, en uno de los casos, tiene que ser en el suelo de una consulta, entre unos estantes y la mesa. Es el caso que se muestra en la imagen que ilustra esta información. Siempre, según las mismas fuentes.
En total, son 4 los primeros centros objeto de queja, pero desde el sindicato sostienen que vendrás más. Todos los actuales en Alicante y su cinturón. Dos, en los centros del barrio de Babel y el de Aaiun. Un tercero en el centro del Cabo de las Huertas, que es uno de los más requeridos en época estival, por su proximidad con las playas más cercanas a la ciudad y, el cuarto, como se ha dicho, en la localidad de Muchamiel. A escasamente unos pocos kilómetros de la capital de la provincia.
El objetivo es que las condiciones mejoren en un contexto de saturación post pandémica, que obliga a los profesionales no sólo a pasar muchas horas en esos consultorios, sino también a dedicar una gran parte de ese tiempo a la atención a los pacientes, por lo que los pequeños ratos de reposo se antojan fundamentales.